Estudiantes USACH

Documental sobre el pasado y el presente de Villa Portales

La vida en la Comunidad Vecinal Villa Portales reflejan las cicatrices del tiempo
transformadas en historias de nuestro pasado que hoy se recuerdan y se comprenden.
Unos de los acontecimientos más dolorosos de la historia de Chile fue el causante que
lazos de amistad, compañerismo y la vida comunitaria se destruyeran por completo.
Hoy, la comunidad resurge. Aún atormentada por el pasado, no existe peor
enfermedad que el miedo, pero mayor remedio que la esperanza

Residentes reflexionan sobre las directivas

El futuro de la Junta de Vecinos en Villa Portales

Autores: Sibel Benavides, Juan Pablo Fuentes, Javier Pérez y Daniela Arellano, estudiantes de Periodismo de la Universidad de Santiago

Editor: David Jofré, académico de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Santiago.

El sábado 12 de noviembre de 2022, la Junta de Vecinos (JJVV) de Villa Portales convocó a sus socios y socias a Asamblea General Extraordinaria. El objetivo de la reunión fue elegir a la Comisión Electoral, cuya función será organizar las elecciones de la próxima directiva. La actual directiva, presidida por la señora Mónica Araya, finaliza su mandato tras enfrentar un convulso contexto marcado por el estallido social y la pandemia. 

La nueva JJVV deberá enfrentar nuevos desafíos, como el aumento de la delincuencia, la eventual recesión económica y la integración de nuevos sectores poblacionales a la Villa, como son los migrantes. Pero no se cuentan solo desafíos coyunturales. Se espera que el mismo proceso eleccionario sea un reto de convocatoria. Gracias a la participación política de las y los vecinos es que se establecerá la legitimidad que tenga la nueva directiva para concretar los proyectos necesarios para la villa.

Las juntas de vecinos en Chile

La Ley N°19.418 regula la estructura, organización y financiamiento de las juntas de vecinos y otras organizaciones comunitarias vecinales en Chile. Dicho texto legal define las JJVV como aquellas organizaciones comunitarias de carácter territorial representativas de las personas que residen en una misma unidad vecinal. Su objetivo es promover el desarrollo de la comunidad, defender los intereses y velar por los derechos de las y los vecinos y colaborar con las autoridades estatales y municipales.

Deben así representar a los vecinos ante las autoridades, instituciones o personas para celebrar o realizar actos, contratos, convenios o gestiones conducentes al desarrollo integral de la unidad vecinal. Gestionan la solución de los asuntos que afecten a la unidad vecinal y colaboran con las autoridades comunales, en particular las jefaturas de los servicios públicos, en la satisfacción y cautela de los intereses y necesidades básicas de la comunidad vecinal. Ante los vecinos ejercen el derecho a una plena información sobre los programas y actividades municipales y servicios públicos. Proponen también programas y colaboran con las autoridades en las iniciativas tendientes a la protección del medio ambiente. 

La ley dispone que las JJVV no puedan perseguir fines de lucro, y estén obligadas a respetar la libertad religiosa de sus integrantes, sin proselitismos. El ingreso a las JJVV es absolutamente voluntario, personal e indelegable y, por tanto, nadie podrá ser obligado a pertenecer a ella ni impedido a retirarse. Asimismo, cada miembro de la junta de vecinos tendrá el derecho de participar en las asambleas que se lleven a efecto, con derecho a voz y voto. Podrá elegir y ser elegido en los cargos representativos de la organización, proponer cualquier iniciativa, proyecto o proposición de estudio al directorio, tener acceso a los libros de actas, de contabilidad y de registro de afiliados, y proponer la censura de los miembros del directorio, en caso de que se encuentre en situación de cesar en sus cargos.

Elecciones en las JJVV

En el actual contexto eleccionario en que se encuentra la Junta de Vecinos de Villa Portales, es relevante destacar los requisitos que tienen los vecinos y vecinas para ser candidatas al directorio, los cuales son:

 

• Tener dieciocho años de edad;
• Estar un año afiliado, como mínimo, en la fecha de la elección;
• No estar cumpliendo condena por delito que merezca pena aflictiva;
• No ser miembro de la comisión electoral de la organización;
• Inscribirse con al menos diez días de anticipación a la fecha de elección ante la comisión electoral.

Falta de información y baja participación

La mayoría de las y los vecinos desconocen la normativa que regula las JJVV. Asimismo, en los últimos años la participación real de los integrantes de la comunidad ha disminuido conforme una creciente falta de educación cívica y un mayor individualismo,  lo cual refleja un problema presente a nivel nacional. Desde la implementación del voto voluntario se ha demostrado que no existe un interés masivo por los asuntos públicos ni el sufragio, lo cual tiende a sustentarse en la falta de información sobre cómo participar e incidir en las decisiones democráticas a nivel local y nacional. La educación cívica se ha visto desarraigada del sistema formal desde mediados de la década de 1990, con la primera reforma educacional desde el retorno a la democracia. Pese a que en la última reforma se incorporó la asignatura de Formación Ciudadana en tercero y cuarto medio, sus contenidos se limitan a instrucciones y teorías.

En paralelo, la participación política en Chile pareciera enmarcarse en la militancia a un partido político, y los medios de comunicación habituales reafirman constantemente la existencia de estos organismos en la vida política chilena. Sin embargo, poco se sabe o se difunde de otros niveles de participación ciudadana, como los centros de alumnos, federaciones de estudiantes, gremios y sindicatos en el ámbito laboral y, por supuesto, las organizaciones comunitarias repartidas en las unidades vecinales. Dichas entidades son difundidas entre los mismos vecinos y publicadas de manera localizada en algún medio comunicacional que posea la comuna. Por lo tanto, rara vez los vecinos se enteran de actividades y acuerdos de estas organizaciones.

¿Qué opinan los vecinos?

Cristian es el dueño del almacén “El Nogal”, y vive en Villa Portales hace ya veinte años.  Respecto a la composición de la actual JJVV, Cristian comparte: “no estoy compenetrado con esa información. Últimamente no me he dedicado a verlo realmente”. Agrega: “Estoy solo acá en el negocio, entonces trabajo 7/7. Faltó el tiempo, a mí eso me juega en contra”. Sin embargo, manifiesta que desde el estallido social y la posterior pandemia se vio una necesidad de organización para enfrentar la coyuntura, y, en tal sentido, se notó la convocatoria de una parte importante de vecinos. “En esos periodos se organizó bastante gente, por diferentes motivos. Por ejemplo, para ayudar a la gente que estuviera necesitada, con una olla común que es típico en los lugares cuando hay crisis. De ahí como que empezaron a unirse un poco más. Y uno lo fue notando”. Su propio almacén fue facilitado para pegar carteles y afiches que informaran sobre reuniones y asambleas comunitarias.

Otro relato es el que comparte Jocelyn, vecina de la villa hace doce años. En relación con la gestión de vecinos, manifiesta que “la verdad yo tengo la idea de que la junta de vecinos ha sido más ausente que relevante” y considera que aquello tiene directa relación con la participación de la gente en los asuntos locales. Para el estallido social nació una gran voluntad de organización de parte de los vecinos. “Salimos a organizar asambleas y todo eso. Creemos que acá hay un gran potencial para organizarse, pero que a veces por problemas de partidos políticos, eso se sofoca”, dice Jocelyn. Ella estima que la baja participación en instancias institucionales locales se debe principalmente a “un problema de difusión, de abrir el espacio y también de un problema que es más cultural. A la gente se le conmina a estar encerrada, a no participar y delegar a otros la responsabilidad”.

No obstante, Jocelyn señala que se encuentra atenta a los que vaya acontecer con las próximas elecciones de la nueva directiva, pero persiste un real problema en cuanto a la información, pues no tuvo conocimiento de la convocatoria a Asamblea Extraordinaria del día sábado 12 de noviembre de 2022 para la conformación del Consejo Electoral. Considera no estar conforme con la actual directiva y su gestión, pues no generó los espacios que pudieron haberse aprovechado luego del estallido social y de la organización en torno a la ayuda producto de la pandemia.

Alexander, un vecino que vive en Villa Portales hace cuarenta años, participa solo a nivel de su block en torno a las gestiones que realiza el respectivo delegado, pero se abstiene de las instancias que presta la JJVV. No tiene una noción real del proceso eleccionario que se avecina. Comparte el diagnóstico de Jocelyn, señalando que se trata de algo cultural: “tiene que ver con un proyecto país, con un proyecto educativo, con muchas cosas. El consumidor se mantiene en su casa esperando recibir los servicios que le entregan los que están capacitados para hacerlo. Entonces, la gente entra en esa dinámica incluso en las cuestiones más íntimas. Y claro, si la gente logra participar, es porque logró superar esa forma de entender el espacio público”. 

Ofreciendo el ejemplo de la pandemia, Alexander menciona algunos proyectos nacidos de los mismos vecinos, como fue la creación de un huerto, las ollas comunes y la realización de un catastro de cesantía. Sin embargo, afirma que estas iniciativas fueron miradas con desconfianza por parte de la Junta de Vecinos, que no brindó apoyo cuando se solicitó. El vecino cree que esto terminó por agotar tales acciones comunitarias, aunque indica que, a pesar de su opinión de la actual directiva, no se trata de un rival, sino que más bien de un ente distanciado del barrio.

Participación y legitimidad

Los testimonios expuestos dan cuenta de que Villa Portales no se encuentra exenta de la crisis en torno a la participación que atraviesa el país. Así, la historia de Chile como un país democráticamente estable y evolucionado se somete a prueba constantemente por coyunturas recientes como el estallido social. Gran parte de la crisis de participación se da por lo que hacen, justamente, nuestros representantes en sus funciones. A diario vemos casos de financiamiento irregular y corrupción por parte de quienes suponen esa esperanza para un cambio. El debilitamiento de las estructuras de los partidos políticos y las voces críticas del modelo neoliberal también parecen hacer eco de esta crisis. No parece ser distinto en ámbitos más locales, donde comienzan a imperar casos de “pitutos”, corrupción, dineros extraviados y tediosos procesos burocráticos.

En este contexto, la comunidad de la Villa Portales hace valer su voz por medio de la participación directa o indirecta en el proceso de organización. La junta de vecinos puede ser una instancia en la cual la comunidad pueda encontrar puntos en común. El artículo 3 del estatuto de la junta indica que su objetivo es “promover la integración, participación y el desarrollo de los habitantes de la unidad vecinal”. Así, es la institución por la cual la gran parte de los residentes de la Villa debería tener un espacio garantizado de participación. La realización de mesas de diálogo horizontales y democráticas parece ser un gran primer paso para dejar de lado esa sensación de “secta” que posee la organización vecinal. Habrá que ver si este proceso eleccionario y nueva instancia logra derribar ciertos prejuicios y adquiere nuevos rumbos para Villa Portales.